Rinconesenlared

lunes, 21 de diciembre de 2015

Y ACABÓ EL 2015...

Creo que este va a ser la última entrada de este año. Después de un intenso trimestre, va siendo el momento de hacer una pausa, desconectar y volver a coger energía, que ya me va quedando muy poca.

Lo más interesante de estas semanas se centra en dos momentos: la evaluación del trimestre (la que hacemos en clase, no las reuniones de profesores) y la celebración del librofórum. Comenzaremos a hablar del segundo momento.

El librofórum es una actividad tradicional que hacemos en 6º sobre la lectura de un libro que hemos trabajado durante el primer trimestre y del que posteriormente, hacemos un trabajo sobre varios apartados (un trabajo de toda la vida, nada especial) y lo exponemos ante las familias que pueden estar con nosotros. Posteriormente, se establece un diálogo con ellos acerca de lo que nos sugiere el libro y las impresiones de los temas que van saliendo.

Ayer tuvimos este encuentro y un gran grupo de padres y madres estuvieron presentes, lo cual agradezco, ya que es un detalle el que nos apoyen con su presencia, y a los chicos les anima y ayuda. Ellos nos ayudaron a enriquecer las aportaciones y reflejaron su opinión en varios puntos. Los más destacados fueron:

-Importancia de la lectura: quizás es un tema evidente, pero las posturas adultas se inclinaron hacia el cuidado de esta habilidad, por motivos que todos hemos argumentado alguna vez o escuchado.

-Castigos: salieron varias posturas interesantes, sobre todo el reconocer los chicos reconocieron la necesidad de aplicarlo en determinadas situaciones, aunque también aparecieron críticas con las diferentes decisiones que se les aplica.

-Vicios: durante el análisis, uno de los aspectos que salieron fue el diálogo sobre las actitudes que tomamos de forma inconsciente: hábitos no saludables. Salieron a la luz temas como fumar, videojuegos y las horas invertidas,... Posiblemente, fue el apartado más interesante.

Creo que con el paso del tiempo, la segunda parte de la actividad va ganando calidad y es la que no nos deja indiferentes. También es la más valorada por los chicos.

El segundo tema que quería tratar hoy es la evaluación que han realizado los alumnos sobre el desarrollo del primer trimestre. Hace un tiempo, hubiese sido un momento que me hubiera suscitado cierta incomodidad, pero actualmente, lo considero como una parte importante de su aprendizaje y de mi aprendizaje.

Han salido muchas dinámicas positivas y que les ha ayudado a sentirse bien en el aula o a cuidar/mejorar su aprendizaje. Destacan todos los momentos que nos han ayudado a generar una buena convivencia (actividades, desayunos compartidos, momentos de inicio del día,...), los diferentes espacios dedicados en clase (famosos rincones de los que ya hemos hablado), la variedad en las estructuras de trabajo (utilizar parejas y grupos en los diferentes momentos de clase) y varios aspectos más como los proyectos en las asignaturas, #miclasemifoto,...

Sobre lo peor valorado, aparecen temas como las posibles interrupciones que sufrimos en clase, la dinámica final que hemos seguido en la asignatura de EF y algunas actitudes de los profesores en momentos puntuales (hay veces que perdemos la cabeza, lo reconozco).

Más allá de lo que han opinado y valorado, me quedo con el diálogo que hemos establecido, donde vamos rompiendo barreras alumnos-profesor y nos expresamos con naturalidad y opinamos con el objetivo de crear mejoras y ayudas para nuestro día a día. ¡Es una gozada trabajar con este ambiente de trabajo!

Con ésto, acabo mi trabajo del 2015. Espero que el año que viene pueda seguir con este espacio. ¡Felices fiestas!


jueves, 3 de diciembre de 2015

#DíadelaDiscapacidad

Esta semana hemos tenido una gran cantidad de actividades de las que podría hablar maravillas. Lamentablemente, no he podido encontrar un día para realizar nuestra asamblea semanal. Pero si hay algo que me ha gustado de ésto, es que les haya dado rabia el no poder hacerlo. Una vez les comenté que no iba ser posible, protestaron por no poder disfrutar de este espacio. Me parece una buena señal, ya que valoran los momentos de diálogo y también les está aportando algo positivo.

Respecto a momentos más concretos, pues podría señalar varios:

-Diario de emociones: llevamos ya unos quince días utilizándolo, y creo que ha sido todo un acierto. Si la semana pasada, ya tenía buenas sensaciones al respecto, esta vez puedo confirmar que se han metido de lleno en este momento y que nos está sirviendo para avanzar. Cada vez disfrutan más de este tiempo y el hecho de escucharnos (a nosotros mismos) y luego compartirlo, nos hace crecer.

-Ambientación de las acciones solidarias de Navidad: nos han pedido que colaboremos en la ambientación de las próximas acciones solidarias y la respuesta ha sido fascinante: hemos decidido crear carteles que acompañen los pasillos y hacer un vídeo motivacional, que sirva para animar a otros a implicarse en estos gestos sencillos.

Nos dividimos en diferentes grupos en función de los intereses y creamos las bases de trabajo en cada uno de ellos. Desconozco los resultados, pero solo por la actitud que han adoptado (mostrarse interesados, con ganas de colaborar, con la ilusión de crear y mover al resto de la gente,...) merece la pena invertir este tiempo para trabajar con ellos la responsabilidad y la solidaridad. Valoraremos más adelante el resto.

-La actividad estrella ha sido el momento inicial de hoy (nuestro amanecer). Una vez entregado el material (hoja de papel) y la consigna (dibujar un lugar que les transmita paz), les he mostrado unas tarjetas. Les ha descolocado mucho porque lo normal es empezar a trabajar. Al ver que eran papeles "ocultos", se han mostrado nerviosos, pero lo que más les ha contrariado ha sido lo que tenían que hacer: realizar la tarea inicial sin su brazo derecho, con un ojo cerrado o sin el otro brazo (este tipo de consignas). Y sin dar más explicaciones y de disfrutar de los esfuerzos que iban haciendo para empezar a trabajar, han tenido que llevar adelante su trabajo.

Una vez que hemos acabado, han expuesto sus conclusiones sobre esta dinámica. Muchos comenzaban sus argumentos a partir de cómo se habían sentido haciendo este trabajo (frustración, molestos, lástima, ganas de superarse, diversión son algunas de las palabras que salían). Escuchar que se han sentido limitados, que tiene que ser duro vivirlo día a día y hora tras hora, que no han conseguido con facilidad lo que pretendía,... refleja que nos ha servido para pensar. Han comprendido qué se siente, aunque sea durante unos minutos, al tener una discapacidad (aunque sea artificial) y han destacado, la capacidad de lucha de un colectivo que pelea constantemente para ser valorados y "ser iguales" (como si no lo fueran ya). ¡Espero que no se nos olvide en nuestra rutina y que apoyemos a esta gente!

-Rincón del silencio: os adelantaba la semana pasada que hemos colocado Juan (mi compañero) y yo un espacio de relajación en el pasillo que compartimos. Teníamos muchas dudas sobre su función, y sobre todo, si les resultaría útil. Pero ya tenemos las primeras respuestas y son muy positivas.

Los chicos van saliendo en el momento que se encuentran nerviosos (algo muy habitual en este momento del curso y de la edad que tienen), alterados, descolocados, ansiosos,... Llegan a este lugar, eligen alguna de las técnicas que les proponemos (sobre todo relacionadas con la respiración) y se aislan durante un par de minutos de aquello que les crea tensión o incomodidad. Más de la mitad de la clase ha tenido la oportunidad de probarlo y por unos instantes, les ayuda a calmarse, a respirar, a pensar en lo que van a hacer,... Seguiremos estudiándolo más a fondo para ver si se trata de "postureo" o tiene su utilidad en ellos.

-Nuestro rincón de asamblea reflejaba las siguientes cuestiones (atentos que esta semana han tenido muchas inquietudes):
¿Puede ser presidente del Gobierno un niño?
Si nuestros padres no hubieran querido tener hijos ¿nosotros estaríamos aquí siendo como somos?
¿Por qué tenemos electricidad?¿Somos bombillas?
¿Los animales piensan?, ¿y tienen corazón?
¿Por qué los animales son maltratados?
¿Qué es la aventura?
¿Qué es un beso?
¿Por qué la mayoría de los adolescentes son adictos al móvil?
¿Qué nos hace creer en Dios?
¿Existe el destino? En ese caso, ¿se puede cambiar?
¿Cómo se habla con el silencio?
¿Por qué la gente se droga?
¿Por qué los atentados tienen más repercusión en países ricos o cercanos a otros de lugares pobres o lejanos?
¿Qué diferencia hay entre el agua del grifo y de una botella?
¿Qué es el odio?
¿Qué es la droga?
¿Se debería jugar con los sentimientos de una persona?

¡Qué vértigo me está dando todo ésto! Pero también, me encanta que vayan planteándose asuntos que con una clase "normal" nos hubiera resultado más complicado. Veremos dónde acaba...


miércoles, 25 de noviembre de 2015

UNA SEMANA MÁS

Esta semana hemos tratado varios temas en nuestra dinámica de clase. No nos hemos centrado en algo concreto, pero si hemos abordado varios asuntos que han despertado interés.

Lo más llamativo para los chicos ha sido elaborar un diario de emociones. El lunes, comenzamos nuestra semana con un folio en blanco encima de la mesa. Después de dar varias indicaciones sobre cómo hacerlo (yo soy bastante negado ante este tipo de trabajos, aunque cada día me fascinan más), lo estrenamos. Tras el ritual inicial de decorarlo y poner nuestro nombre, cada día comenzamos nuestros momentos de clase escribiendo o dibujando cómo nos sentimos. Es algo sencillo, porque el uso de emoticonos nos está ayudando a identificar esas sensaciones. También, algunos "atrevidos", empiezan a escribir esos sentimientos.

Siento que vamos dando pasos (lentos, pero los vamos dando) y me encanta ver que aprovechan este espacio para ellos, e incluso, lo han normalizado: dedicarse un tiempo a pararse, pensar en ellos mismos y cómo están y compartirlo con total naturalidad con el resto de sus compañeros.

Otra cuestión que sigue emocionándonos (a mi el primero) es el ir recibiendo noticias sobre nuestro proyecto "miclasemifoto". Cada vez que nos llega una imagen, lo comentamos entre nosotros y salen expresiones como: "es tremendo que una clase pueda lograr esto", "nunca imaginé que tanta gente colaboraría", "me encanta", "estoy feliz porque lleguen las fotos",... Hace un par de meses leí un artículo que hablaba de la importancia de la emoción en los alumnos para que estén conectados con su aprendizaje. Cada día que paso en un aula, valoro que es fundamental. Si no sienten, no los ilusionamos ni los comprometemos a proyectos propios, es difícil conectarlos a otros aprendizajes esenciales.

El tercer tema que quiero compartir está relacionado con un rincón de clase que está triunfando (llevamos dos semanas que están siendo muy utilizados): temas para abordar en nuestras asambleas. Comparto todas las preguntas que han pedido tratar esta semana pasada:
-¿Existen las casualidades?
-¿Qué sentido tiene la vida?
-¿Qué motivos tienen los terroristas para matar?
-¿Se deberían mandar deberes?
-¿Qué es amor y ser amado?
-¿Por qué hay gente que quiere cambiar de sexo?

Sinceramente, hay muchos temas interesantes que podíamos tratar en clase, y me da rabia no poder mejorar mi organización para poder responder a sus inquietudes, que no a sus respuestas (¡Ojalá!). Algunas son complicadísimas de afrontar, pero si ellos lo piden, es porque se cuestionan muchos asuntos cada día.

Por último, quisiera contaros que esta semana comenzaremos con varios rincones extras que no contaba con ellos. Los hemos tenido que situar fuera del aula, porque ya no tenemos mucho más espacio en nuestra corchera trasera. Os iremos informando de su utilidad... o no.

viernes, 20 de noviembre de 2015

LOS TERRORISTAS Y LOS MAYORES

Esta semana hemos tenido varios momentos interesantes, donde hemos intercambiado varias impresiones acerca de dos temas que les preocupaban o interesaban.

Como es lógico, el asunto fundamental de esta semana se ha centrado en los diferentes ataques terroristas sucedidos durante el fin de semana. Los primeros argumentos reflejaban varias emociones: miedo, tristeza, desconcierto, dubitativos,...

Las principales cuestiones que se planteaban acerca de las intenciones de estos personajes, y sobre todo, la más repetida ¿por qué?

¿Por qué lo hacen?
¿Por qué matan?
¿Por qué a gente inocente?
¿Por qué lo hacen de esta forma?

Muchos interrogantes y pocas respuestas que les ayuden a aclarar sus dudas. Es difícil tener que "enfrentarse" a un grupo de alumnos, que piden soluciones a todas sus cuestiones y no poder resolver ni las más repetidas.

Parece, que tras extendernos en un diálogo respetuoso, hemos logrado el objetivo de hacerles ver que el Islam no está representado por estos "personajes", que la comunidad musulmana no actúa así y que como en todas las comunidades o círculos sociales, existen fanáticos que alteran la convivencia, independientemente de razas, culturas, creencias o religiones. Con eso, me doy por satisfecho.

La segunda reflexión me ha impactado mucho. No tiene nada que ver con temas actuales. Lo que ellos querían tratar, tenía que ver con una pregunta sencilla que trasladaban en nuestro rincón de la asamblea: ¿cambian las personas a medida que se hacen mayores?

Muchos de los alumnos expresaban que era un cambio lógico, y que con el paso del tiempo, sus intereses se iban perdiendo o cambiando. Lo comparaban con el gusto por jugar o dibujar, que lentamente se transformaba hacia un interés por el dinero o el éxito. Otros decían que, de mayores, tenemos que cambiar sí o sí, que nuestro propio ritmo de vida nos obligaba a adaptarnos a una realidad diferente al juego o a la felicidad. añadieron que nos empezarán a gustar asuntos que ahora mismo no tienen sentido para ellos: política, dinero, éxito,... Me encantó descubrir que ellos viven en torno a la felicidad. Son felices, posiblemente sin saber la razón, pero lo son (es algo que me crea mucha envidia).

Una pregunta que les ayudó a aterrizar fue esta: ¿qué os gustaría mantener cuando seáis más mayores y que os gustaría perder/cambiar de aquí a unos años?. Algunas ideas que lanzaron sobre la primera impresión fueron: mantener la alegría, mis amigos, el sentido del humor, tener pocas ocupaciones y preocupaciones, el espíritu de niño, el ser sorprendido con detalles grandes y con los pequeños... y ser felices. En cambio, me asustó la visión que tienen de nosotros, los adultos. Intentarían evitar nuestra tristeza (aunque algunos lo señalaron como algo necesario para aprender), la seriedad constante, las miles de ocupaciones diarias, los nervios o las tensiones que nos ahogan, nuestro pesimismo constante,... La frase que más me impactó fue: "No me gusta ver a los mayores todo el día tristes, me angustia".

Durante el debate, me sorprendieron gratamente algunas preguntas que lanzaron y que se iban respondiendo o argumentando los unos a los otros, alcanzando un nivel de reflexión admirable (yo jamás hubiera sido capaz de razonar algunos de los enunciados que ellos proclamaron).

¿Podemos elegir nuestro futuro?
¿Qué sentido tiene trabajar constantemente y ganar mucho dinero si luego no puedes disfrutarlo con los tuyos?
¿Es mejor trabajar mucho y tener algo que comer, o no trabajar y no poder comer?

Haciendo una relectura de la sesión, me aterra ser consciente sobre la impresión que tienen de los adultos. También me hace ver que no se les escapa nada de lo que nos ven día a día, que somos modelo para todo: para aquello que les encanta y que intentan incorporar en su día a día, y también de lo que intentan evitar: actitudes que no les atraen nada, sobre todo, aquellas que les alejan de la felicidad.

Sinceramente, es un grupo muy transparente y muy reflexivo. Me encanta compartir con ellos estos momentos, y que puedan comunicar sus interrogantes, dudas, o simplemente, sus pensamientos. Creo que es muy enriquecedor para todos (para mí el primero) el poder contagiarnos con nuestras opiniones y aportaciones. Cada día disfruto más con nuestras horas de Filosofía.


miércoles, 4 de noviembre de 2015

LOS RINCONES DE CLASE


Hoy ha tocado el turno de valorar el funcionamiento de los rincones de clase, algo que les ha llamado especialmente la atención en este curso.

Siguiendo el ejemplo de César Bona, el año pasado, decidimos en este curso (6º de Primaria) habilitar varios espacios de la corchera de clase para que reflejen en ellos diversos temas:

Critico que...
Necesito ayuda con...
Una canción para esta semana...
Desayunos compartidos...
La noticia de la semana...
Propuestas para clase...
Temas de la asamblea...

Al principio de curso, marqué unas normas de funcionamiento para intentar que su uso no interrumpiera el ritmo de clase, pero poco a poco, vamos ajustando esos criterios y vamos consensuando los cambios entre todos, con la intención de potenciar este espacio y que el "trabajo diario" no se vea alterado.

Ellos iban aportando su visión a estos lugares, destacándolos como algo que les encanta porque pueden expresarse libremente, pueden desahogarse en ciertos momentos, participan en la dinámica y estructura de la clase, el diseño,... La verdad que están bastante enganchados.

Llegó el momento de estudiar las propuestas que hacían, cuando una compañera nos explicó su propuesta: crear un rincón de Arte. Les pregunté si era para colgar cuadros famosos, imágenes artísticas,... pero no había acertado con sus intenciones. Su propuesta era tener un lugar en clase para colgar aquellas composiciones que iban haciendo a lo largo de la semana: en las aburridas clases de Lengua, en los amaneceres de los jueves, en los ratos de "estudio" casero,...

Me pareció una idea bastante buena, dado que son auténticos artistas (si pudierais ver los dibujos que son capaces de hacer cuando están en pleno aburrimiento me comprenderíais) y a partir de esa idea inicial, fuimos completando el formato y su funcionamiento. Lo que acordamos fue: que sea algo libre, dedicar un escenario un poco más grande lo habitual para que todos tuviéramos la oportunidad de ir colgando aquellos dibujos que nos apetezca o queramos colgar  y la tercera, fue la que me descolocó. solicitaron una hoja que esté en el centro de los dibujos para poder escribir qué emociones percibían en el momento que lo observaban.

Sinceramente, no me esperaba en absoluto que propusieran algo así, pero una gran mayoría lo apoyó y veían necesario dedicar un lugar de clase para reflejar su sentir y las emociones que ellos iban sintiendo con la observación de este rincón. Me parece muy adecuado que reclamen formas de expresarse, que lo vean como una necesidad y que no tengan reparos en compartirlos con sus compañeros, aprendiendo a identificar ciertas emociones. También me parece muy interesante que reclamen el arte como algo de disfrute y como algo que les hace sentir. ¡Es una forma de empezar!

El lunes comenzaremos con este trabajo. Veremos en qué acaba...
¿Qué existe detrás de la muerte?

Tengo pendiente un artículo de la semana pasada, y no quería dejar de reflexionar sobre un tema que apareció en las preguntas que lanzan los chicos.

Como en otras ocasiones, les fui leyendo todas las propuestas que habían escrito hasta esa fecha y ellos iban levantando la mano, señal que me hacía ver si les interesaba tratar.

Después de proponer temas como qué era el amor, los posibles miedos que tienen, la independencia de Cataluña, la soledad,... la que más les llamó la atención fue: ¿qué hay detrás de la muerte?

Coincidía que era la semana de Halloween, e imaginé que estaba relacionado con lo que habían trabajado en otras asignaturas, pero me llamó mucho la atención la necesidad que manifestaban para hablar de este tema (22 de 24 alumnos). Pensé que era algo complejo, pero... es lo que habían decidido.

Las primeras intervenciones hablaban sobre cómo veían la muerte, centrándose en los términos cielo e infierno. Otros hablaban de un sueño prolongado, una vida mejor, alguna "leyenda" o cuento que habían escuchado...

Una vez habían argumentado sobre este primer asunto, comenzó lo inquietante del diálogo nada más lanzarles una pregunta simple: ¿por qué produce tanto temor?¿por qué cuesta hablar sobre este tema?

Algunas caras cambiaron repentinamente y desde aquí, comenzamos una conversación más profunda, relacionada con nuestras emociones y con las posibles experiencias personales. Aparecieron mucho palabras como "tristeza", "miedo" y "terror". Acabé con una buena sensación y creo que ellos, a pesar de la temática, también. 

Realmente, pienso que es un tema que les asusta mucho (experiencias vividas que nos han contado lo recalcan), que tampoco han hablado o se han atrevido a hacerlo de forma pública (sí en círculos cerrados) por ser un asunto "tabú" y que el hecho de compartirlo entre todos, ha sido beneficioso a la hora de comprendernos entre nosotros y conocernos un poco más.

 Lamentablemente, no pudimos acabar la sesión, porque el tiempo se nos echó encima, pero destaco varios apartados:
-El ambiente de escucha y de atención sobre lo tratado.
-Cómo vamos aprendiendo a respetar los turnos de palabra.
-La expresión libre de lo que pensamos, sin miedo a ser juzgados, se rían, contar lo que "quiere escuchar el profesor".

jueves, 15 de octubre de 2015

#miclasemifoto


La semana pasada, concretamente el viernes, proponía a los chicos realizar un proyecto diferente, algo que nos ayudara a generar o mejorar nuestro clima de convivencia y también nuestra cohesión de grupo. No tenía muy clara la forma, pero estaba convencido que una vez lanzara una idea, todos construiríamos algo potente.

Les propuse una idea inicial y un formato que podíamos emplear. Una foto para motivar la actividad y qué y cómo podíamos darle uso. No hizo falta más. A todos se les iluminó la cara (incluso al 70% de la clase que tengo la sensación que no aguantan mis "chapas" diarias). Fue impactante cómo cambiaron sus rostros, su interés, su posición, su actitud corporal,... Estaban deseando trabajar en algo, construir SU proyecto.

Las palabras con las que resumían su sentir o la emoción más destacada fueron: entusiasmado/a, nervioso/a, ilusionado/a,...

Después de una semana, en la que han tenido tiempo de traer nuevas ideas, hemos vuelto a retomar esta tarea. Si bien la hora de matemáticas ha sido un momento muy parecido al resto de los días, la siguiente sesión ha sido espectacular.

Han sido capaces de:
-Trabajar en parejas aportando ideas.
-Marcar los pasos que debemos dar.
-Crear normas de trabajo
-Estimular su mente y mejorar la idea inicial.
-Estar despiertos e interesados hacia un trabajo de clase.

Aún queda mucho para ver los primeros resultados, incluso para contaros algo más sobre lo que vamos a hacer (queremos cuidar el efecto sorpresa), pero os adelanto algo: esta foto dará mucho que hablar!

miércoles, 14 de octubre de 2015

REFLEXIONES DE UNA CLASE DE PRIMARIA

Sinceramente, hace tiempo que llevo dándole vueltas a esto de crear un blog. Tuve algún proyecto fallido, pero, ya sea por falta de ideas, de ganas o de recursos a la hora de poder llevarlo a cabo, los fui olvidando.

Últimamente, tenía ganas de experimentar con otro intento, pensando en varios temas, pero ninguno me convencía... hasta que ellos me dieron la solución. ¿Por qué no crear algo donde se reflejen todas esas conversaciones-diálogos-asambleas que tenemos en nuestro día a día?

Soy profesor de Primaria, concretamente tutor de 6º, en un centro marista de Palencia. En este comienzo de curso, han empezado a lanzarme preguntas de mucha complejidad, grandes cuestionamientos globales e incluso personales. Por ello, espero que este espacio refleje sus dudas, los comentarios que van haciéndose/me, su aprendizaje,...

¡Vamos allá!